Todos los actores vinculados a la actividad turística se vieron afectados con las restricciones de circulación y las medidas sanitarias dispuestas con el aislamiento social obligatorio y prohibición de viajes en el país desde hace más de 40 días. Entre ellos se encuentran los guías profesionales de turismo, fundamentales en todo turismo organizado precisamente en una ciudad turística.

Leoni Gaffet es la presidenta de la Asociación de Guías Profesionales de Turismo de la ciudad y comentó la realidad del sector por estos tiempos donde una nueva temporada de ballenas debería estarse disponiendo, cosa que no sucederá. “Para nosotros es muy serio porque somos trabajadores independientes, monotributistas, no somos empleados, si trabajamos recibimos el dinero correspondiente si no lo hacemos no ingresa dinero. Para nosotros el problema no es en este preciso momento porque estamos atravesando la temporada baja, nuestro problema comienza el mes que viene que no habrá temporada de ballenas, el futuro cercano no se ve bien. Hay colegas que tienen un segundo empleo, pero hay guías que viven exclusivamente de este trabajo y en sus hogares no hay un segundo ingreso. La situación se presenta muy complicada”.

Si bien existen créditos para este tipo de trabajadores, lo cierto es que cada guía evaluará su situación particular y se trabaja en nuevos productos, nuevas formas de trabajo y protocolos de trabajo a futuro.

“Estamos esperando a que la situación se relaje un poco y pueda haber un poco de turismo. Se espera para lo que resta del año un turismo regional, local, un turismo que no requerirá de guías de turismo y somos la cola del eslabón de la cadena del turismo. Este 2020 es un año perdido, salvo que haya un cambio muy abrupto y se genere un movimiento turístico”.

En la zona del valle y Península Valdés son más de 240 los guías profesionales de turismo por lo que el movimiento que se comience a generar tampoco alcanzará para los casi 300 guías de todo Chubut.

“Cuando todo esto pase habrá que ver cómo es la reacción del pasajero. Es una situación muy seria la que estamos atravesando todos, especialmente los guías también. Vemos un futuro bastante negro pero pensando en un cambio que permita comenzar con el movimiento turístico”, destacó Leoní Gaffet.

Próximamente los guías presentarán algunas propuestas para aumentar su trabajo una vez que se reactive el turismo como por ejemplo la guiada obligatoria para el turismo en distintas Áreas Naturales Protegidas. “Pensamos que Punta Tombo podría ser una primera opción de que el recorrido cuente con un guía de turismo, que sea en grupos de 15 personas pero acompañados durante todo el recorrido por un guía profesional, tal vez igual en Península Valdés, pero son ideas que aún no se presentaron para este año y que nos ayudaría a tener ingresos”, finalizó.