Bajo la organización de la Coordinadora Interescolar Puerto Madryn se realizó una olla popular en las puertas del edificio municipal como una forma más de visibilizar los reclamos que los estudiantes están llevando adelante. Momentos de tensión y forcejeos se vivieron cuando los organizadores intentaron llevar una garrafa hasta el lugar donde se había dispuesto la mesa para cocinar. Allí fueron interceptados por un efectivo policial que comenzó con una serie de preguntas, entre ellas quién era el dueño de la garrafa y que no se podía exponer a los menores a su uso. Tras utilizar esos argumentos tomó posesión de la garrafa para evitar que se pudiera realizar la olla popular.

Ante la actitud del efectivo policial, cuyo rostro evidenciaba que la situación lo había desbordado, se interpuso la dirigente de la ATECh y otros adultos con el fin de hacer reflexionar al uniformado y evitar que se llevase la garrafa.

Eso generó empujones, idas y vueltas junto a un marco extremo de tensión en la calle Belgrano, con menores de edad en el medio y una garrafa que era tironeada de un lado para el otro.

La dirigente de la ATECh, Carina Morello, fue tajante al analizar lo sucedido al afirmar: “con las pibas y los pibes no porque pasamos a un lugar donde no hay nada bien y eso no está bueno”.

La representante de los docentes explicó que la realización de la olla popular “fue una decisión de ellos (alumnos)” puntualizaron que en la visibilización del reclamo hubieron “chicos y chicas de todas las edades que no vienen a romper nada, todo es absolutamente pacífico, con una altura y un compromiso que muchos adultos no tienen, ni policías no tienen porque vinieron a apretujar y maltratar físicamente a los pibes. Hay muchos gobernantes que deberían aprender de ellos. Espero que algo se haga con los policías que actuaron de esta manera porque quedamos lastimados, los pibes llorando y no es la manera…con los pibes y las pibas no”.

Sobre los momentos de tensión que se vivieron alrededor de la garrafa, la dirigente de la ATECh precisó que fue “muy difícil lo vivido y no puedo creer que trabajadores vengan a violentar a pibas y pibes que son menores de edad y que podrían ser sus hijos” afirmó la dirigente gremial, quien explicó que ante la situación que se vivía.

En su relato comentó  que “cuando bajamos la garrafa se nos vieron todos los policías. Cuando quisimos levantar la garrafa, ellos empezaron a forcejear de una manera agresiva, les gritaba que no tocaran a los pibes ni a las pibas porque estaban agarrando la garrafa, ni que tampoco los policías hombres nos tocaran a las mujeres. Fue tremendo el tire y afloje”. Carina Morello recordó que en un momento de la discusión “un policía dijo bajémosla y automáticamente la trajimos al medio de la calle, la conectamos al mechero y se empezó a cocinar la olla popular”.