La incertidumbre era creciente y el temor dejó de ser una realidad para convertirse en una realidad. El secretario General de la UOCRA, Mateo Suárez, confirmó que “tras la suspensión nos notificaron que desde el viernes 1º de noviembre todos los trabajadores estaban cesanteados”.

La decisión de Genneia golpea a 900 hogares. Ante la confirmación de la decisión empresarial la UOCRA pidió una audiencia de conciliación obligatoria que se realizará el martes en Capital Federal. Hasta tanto ello ocurra permanecerán tomados los portones que la empresa tiene a la vera la ruta 3 donde se realizaban los trabajos del montaje del parque eólico.

Suárez explicó que “en la nota que mandaron dicen que desde el viernes están todos cesanteados”  precisando que “a partir de hoy se inicia otra etapa”.  La misma incluye el dictado del “estado de alerta y movilización” porque “son  trabajadores, padres de familia de nuestra ciudad que perdieron su trabajo acrecentando la desocupación y generando una gran crisis social de dimensiones desconocidas”.

Junto a ello, remarcaron “si hace un par de meses fuimos el centro del país en cuanto a la cantidad de energía eólica que nuestra provincia podía generar, hoy somos el centro de atención de la desocupación”.