La comunidad de la escuela Nº 46, que comparte edificio con el establecimiento Nº 170, están esperando respuestas concretas por parte del gobierno provincial a los problemas de infraestructura que impide el dictado de clases. Los alumnos solo han tenido 35 días de clases durante todo el ciclo escolar motivado por el conflicto docente y, solucionado ello, los problemas existentes con el gas y con la caldera. Esto debe agregarse que ya son 5 semanas ininterrumpidas donde los chicos no concurren a clases por las falencias existentes y que no son solucionadas por las personas con capacidad de dar respuestas.

Los padres dijeron basta a una situación de irregularidad y de ausencia del estado para garantizar el derecho a la educación para los menores. Jessica, madre de dos alumnos y auxiliar del establecimiento, explicó que “la escuela no está en condiciones como para que ellos (alumnos) empiecen) aunque los docentes dan tareas para que sean realizadas en los hogares junto al grupo familiar.

Los problemas centrales fue la aparición de pérdida de gas en los artefactos, tanto caloramas como las cocinas. Una de las soluciones fue inhabilitar una de las cocinas aunque el resto de los inconvenientes siguen estando porque las soluciones llegan en cuentagotas.

La mamá de dos alumnas reconoció que “los directivos mandaron millones de informes a obras públicas y nunca lo solucionaban. El tema de las cloacas está desde que comenzaron las clases” acotando que “se mandaban las notas y ellos solo las recibían hasta que sucedió lo del gas”.

Otro de los padres expresó la indignación por todo lo que está sucediendo y que perjudica a los menores y modifica el diseño del hogar. “El tema es que ya es demasiada burocracia  porque ha pasado mucho tiempo ya. Hemos tenido el paro, las vacaciones, dos meses con este problema… los chicos solo han tenido 35 días de clases durante todo el año. Esto es un disparate”.

El reclamo de las familias es que las autoridades de obras públicas den respuestas urgentes para que no se pierdan más días de clases porque “acá tendría que estar la ministra de Educación dando la cara”. En ese sentido, Jessica reconoció que “la escuela está pintada gracias a los padres, a los auxiliares… generalmente las cosas las están arreglando los padres y los docentes”.