Día Internacional del Pingüino: un recurso natural por excelencia para la ciencia y el turismo en Puerto Madryn
25 - abril - 2018
Hoy, 25 de abril se conmemora el Día Internacional del Pingüino y la fecha coincide con la migración al norte de los pingüinos Adelaida de la Antártida y busca generar conciencia para la conservación de estas simpáticas aves.
En todo el planeta existen 18 especies y 8 de ellas se hacen presentes en la Argentina. Punta Tombo es el emblema más importante para nuestro país cuando se hace referencia al pingüino de Magallanes y desde el CCT Conicet Cenpat existe un grupo de trabajo que realiza diferentes tareas y estudios para conocer aún más sobre estos animales y así realizar un fuerte trabajo también de conservación. El turismo responsable hace que sea uno de los atractivos característicos de nuestra zona de septiembre a abril de cada año.
Indicadores de referencia sobre el estado de su hábitat, los pingüinos son considerados embajadores a la hora de destacar la importancia del océano y sus recursos, y para analizar los efectos del cambio climático y la degradación de sus lugares de reproducción.
El Dr. Flavio Quintana es el Director del Laboratorio de Ecología de Predadores Tope Marinos del Instituto de Biología de Organismos Marinos IBIOMAR – CONICET y cuenta con un equipo conformado por la Dra. Agustina Gómez Laich, Dr. Juan Emilio Sala, Dra. Gabriela Blanco, Dra. Soledad Leonardi y la Dra. Luciana Gallo, todos investigadores de CONICET.
“Punta Tombo es una colonia muy importante pero no es la única, hay muchas otras colonias. Estudios recientes han analizado datos conjuntos de ocho colonias a lo largo de toda la distribución del pingüino de Magallanes en la provincia de Chubut y claramente se ve que las colonias que están ubicadas al norte de la provincia –Península Valdés, Golfo San Matías al sur de Río Negro, por ejemplo, – son colonias que se están incrementando a una tasa bastante alta. Esto es que se incrementa anualmente el número de animales adultos reproductores que vienen a poner huevos y a cuidar a sus pichones en esas colonias. En contraste a este crecimiento de las poblaciones reproductivas, están las colonias que se ubican en el centro de la distribución, como Punta Tombo y más al sur. En esas colonias, las más grandes como lo es Punta Tombo, durante los últimos años se fue notando una disminución en el número de parejas reproductoras en cambio más al sur, son mucho más pequeñas en cuanto a cantidad de nidos pero con parejas reproductoras estables en cuanto a números. No podemos sacar conclusiones con lo que pasa en una sola colonia reproductora porque existen, evidentemente, intercambios, redistribuciones durante los últimos años y esto puede responder a diferentes condiciones que puede ofrecer el océano para los animales durante su reproducción”, destacó Quintana.
Sobre el Laboratorio de Ecología de Predadores Tope Marinos del Instituto de Biología de Organismos Marinos IBIOMAR – CONICET
Flavio Quintana explicó el trabajo que realiza este laboratorio con respecto y especialmente a las colonias de pingüinos de Magallanes de las costas del Chubut. “Somos un grupo que trabaja haciendo investigación sobre aves y mamíferos marinos y nos enfocamos especialmente en aves marinas buceadoras y el pingüino es una de ellas al igual que el cormorán. Nuestro objetivo es estudiar el comportamiento del pingüino en el mar y determinar el esfuerzo que los animales hacen para obtener alimento en el mar. Cuánto necesitan para sobrevivir y cómo se encuentran las distintas poblaciones reproductivas en cuanto al esfuerzo que tienen que hacer para alimentarse. Para estudiar esto utilizamos diferentes tecnologías, generalmente tecnología de punta, pequeños instrumentos que colocamos sobre los animales y determinan no sólo la ubicación de los animales en el mar sino el gasto energético que hacen los animales, comportamientos, presas que capturan. Con esto podemos comprender cuáles son los requerimientos energéticos básicos de las poblaciones de pingüinos de Magallanes a lo largo de la costa de Argentina en general y particularmente en las colonias de Chubut”.
Conocer aún más las aves marinas buceadoras
Los resultados obtenidos sobre el estudio de pingüinos, una de las aves marinas buceadoras, con las que se trabajan desde el IBIOMAR indican que “a través de los pequeños sensores colocados en los animales podemos entender cada uno de los movimientos que estos animales realizan en el mar, en qué lugar del mar lo realizan, incluso conocer las características oceanográficas del área marina que están utilizando. Son instrumentos muy pequeños que registran más de 20 datos por segundo. Esta tecnología se fabrica en el exterior, pero en el último tiempo hemos avanzado con gente del INTI especialmente con el Centro de Micro y Nano Tecnología en Buenos Aires en la creación de este tipo de instrumentos hechos en Argentina. Para la próxima temporada tendremos instrumentos desarrollados en Argentina que van a ser capaces de medir y captar la posición de los animales en el mar y cada una de las variables que medimos: velocidad, posición del cuerpo, aceleración, temperatura del agua. Además se les incorporará una pequeña cámara en este dispositivo para identificar los comportamientos con las señales electrónicas que recibimos. Los registros nos asombran día a día”, destacó Flavo Quintana.