El futuro del transporte público de pasajeros sigue siendo una gran incertidumbre debido a la quita del subsidio nacional que liberó el precio de los costos y que, sin otra inyección económica, deberá trasladarse al boleto. “Para que la empresa siga trabajando normalmente, sin el subsidio, debería mantener la misma cantidad de pasajeros con un boleto a 50 pesos” dijo el intendente Ricardo Sastre, quien afirmó que “eso es imposible para cualquier trabajador y estudiante”.

Estos valores obedecen a la quita del subsidio al transporte. Esto trajo aparejado que “a partir del 1º de enero las empresas de transporte de pagar un litro de gas oil a 9 pesos pasaron a pagarlo a 40 pesos” detalló e intendente.

Ante ésta realidad, el jefe comunal mantuvo una comunicación con Fabricio Balock, propietario de Ceferino del Sur, donde le pidió que “nos tomemos el mes de enero para ir resolviendo la situación” aclarando que “no podemos dejar de gestionar ni darle respuestas a la empresa porque funciona por los ingresos. Al no percibir 6 millones de pesos mensuales se verá afectada”.

Una de las variables en análisis es la posibilidad que el gobierno provincial declare la emergencia en el transporte, ley a la cual Madryn adherirá porque generaría herramientas para sobrellevar la crisis.

Sastre aclaró que “más allá que se liberen las tarifas vamos a seguir haciendo las gestiones para  que el gobierno provincial pueda ayudar a los municipios apalear está situación” aunque advirtió que “no vamos a dejar de reclamar ni callarnos por la quita de los subsidios que hizo el gobierno nacional”.