La crisis económica y laboral sigue golpeando a lo largo de toda la cadena productiva del país, provocando incertidumbre en el futuro de cada uno de los ciudadanos. En Puerto Madryn el caso testigo de este escenario plagado de nubarrones es Metalúrgica Oliva cuyo propietario dejó de producir, de pagarle a su personal y de no indemnizarlos ni enviarles el telegrama de despido. Ante ello, los operarios quedaron de rehenes porque no pueden cobrar las tres quincenas adeudas ni la liquidación final por los años servidos que van desde los 6 hasta superar los 30 años de antigüedad. Ante este escenario y la imposibilidad de poder afrontar el pago de los servicios y los alquileres, un grupo de trabajadores se reunió con concejales para explicar el estado de situación y solicitarles gestione una ayuda económica y el corrimiento de los vencimientos de los servicios esenciales.

Ramón Millan y Ricardo Altamirano ofrecieron de voceros de los 24 trabajadores que son víctimas de un proceso donde los costos por producir en la Patagonia los dejó sin trabajo. A ellos la ausencia de un empresario que les cancelé lo adeudado y que solo les digiera que iban a recibir el dinero correspondiente a cada uno de ellos cuando vendiera el predio, dado que la maquinaria pretende llevarse a su otra fábrica montada en el gran Buenos Aires.

Millan explicó que la reunión permitió “plantearles a los concejales un pedido de ayuda para los compañeros que recibieron el aviso de corte por parte de Servicoop, debido a que adeudan entre dos y tres facturas”. A ello se suma que Metalúrgica Oliva hace dos meses que no abona las quincenas, ni el aguinaldo ni los reajustes por aumento provocando una deuda creciente para con sus empleados y estos con sus obligaciones.

El monto del subsidio no está definido aún sino que se resolverá en el marco de una reunión que se concretaría este viernes donde habría alguna respuesta sobre las gestiones encaradas ante Servicoop para posponer la cancelación de las facturas para este grupo de trabajadores.

“El dueño de la empresa nos abandonó y no tenemos ningún tipo de ingreso” dijo el delegado, planteando el estado de situación que afronta solo la palabra del empresario que cancelaría lo adeudado y las liquidaciones finales cuando vendiese el predio de la firma.

“Varias veces convocamos al dueño a la secretaría de Trabajo pero solo una vez concurrió donde nos dijo muchas cosas menos la solución que nosotros queríamos: que nos manden el telegrama para salir a buscar trabajo tranquilo y hacer los trámites para acceder al subsidio por desempleo” comentó Ramón Millan. Por su parte, Altamirano recordó que el empresario “dijo cualquier cosa porque no habló de la venta. Nunca nos dijo voy a hablar con tal comprador y para tal fecha tengo algo concreto”.