“Estamos hablando de una hipótesis de intencionalidad” afirmó Marcelo Dopazo, jefe del cuerpo activo de bomberos voluntarios tras recorrer el aula siniestrado en la escuela Nº193. Asimismo, detalló que en el pizarrón dejaron “un mensaje claro de los daños que iban a producir”.

Pese a que el fuego se circunscribió a un solo aula los daños que generó la combustión y la temperatura fueron muy importantes y demandarán un tiempo prudencial para poder volver a poner en condiciones ese espacio físico.

El peritaje realizado en el lugar donde se focalizó el incendio permitió determinar que se produjeron “daños importante  como la caída de revoque, cielorraso, en la instalación de la redes de agua y eléctrica. El caño troncal de gas no fue afectado porque pudo haber sido más compleja la emergencia. El fuego no tuvo mucha combustión más allá de lo que afectó puntualmente que generó temperatura que daño las paredes y diversas instalaciones”.

Dopazo explicó que en la inspección realizada al aula siniestrada “se observan más de un foco ígneo que no se condice con una propagación. Eso es una evidencia que pudo tratarse de un hecho intencional”.

Asimismo, el jefe del cuerpo activo consideró que “de tratarse de un hecho intencional es lamentable que estén sucediendo estas cosas porque es de vieja data los incendios de las escuelas. En la mayoría la hipótesis más firme es que sea intencional”.

Cabe recordar que el incendio se generó en una de las aulas de la escuela Nº 193  donde la emanación de humo afectó el normal dictado en dicho establecimiento de nivel primario, así como en la escuela Nº 790 y en el edificio de nivel inicial Nº 762. Todas las presunciones dan cuenta de un siniestro de características intencionales agravado por una leyenda dejada en el pizarrón donde se advierte “vamos a prender fuego la escuela!!!”.