La presencia de gente en el Plan Detectar y en la guardia del hospital Isola disminuyó respecto al comienzo del mes de enero. Esto permite ratificar la presencia de una meseta en los casos que la ciudad registra de COVID-19 y que se traslada en los niveles de ocupación de camas en el centro asistencial.

Ariel Urbano, director del nosocomio, detalló que “tenemos el 50 por ciento de ocupación en clínica médica y del 60 por ciento en terapia intensiva con asistencia ventilatoria” remarcando que los adultos mayores son los grupos de riesgos y los que tienen el mayor porcentaje de letalidad.

El facultativo sostuvo que la curva “se mantiene estable” aunque en una meseta alta que permite inferir que “no creo que lleguemos a no tener pacientes internados, más con el movimiento de gente porque hay una circulación normal. Seguimos insistiendo con el cuidado de la gente y el cumplimiento del protocolo que nos permitiría pasar bien el verano”.

El director del hospital Isola remarcó que se “ve que en el Plan Detectar, que es nuestro principal lugar de testeo, tenemos una disminución de pacientes con síntomas que van a testearse. Tenemos un número bajo de casos confirmados. Con eso va disminuyendo la cantidad de casos activos en la ciudad”.