Mientras Javier Milei quiere impulsar una reforma para eliminar el femicidio del Código Penal en Argentina, la Asociación de Mujeres Penalistas de Argentina remarcó que es un retroceso y minimizar la violencia contra las mujeres
2 - febrero - 2025

Argentina planea eliminar el feminicidio de su Código Penal, Según ha declarado el Gobierno de Argentina, Javier Milei, asestando un nuevo golpe a los derechos de la mujer en el país, planea eliminar la figura del feminicidio en el Código Penal. El ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, anunció recientemente que el Gobierno pretende impulsar una reforma en el Congreso para eliminar esta figura. Las respuestas no tardaron en llegar y Noticias PMY dialogó con Mariana Barbitta, presidenta de la Asociación de Mujeres Penalistas de Argentina quien remarcó que “no solamente manifestamos nuestra preocupación, sino esta palabra que entiendo que es la clave, que es el retroceso”.
Además agregó que “nosotros advertimos un retroceso enorme en todas las conquistas que tiene Argentina en particular, un país pionero en materia de cuestiones de género, por ejemplo, en haber sancionado una ley de identidad de género, la ley de matrimonio igualitario también, y por supuesto la ley Micaela, esta idea, digamos, legislativa de formar a la gente del Poder Judicial, del Ministerio Público Fiscal, del Poder Ejecutivo Legislativo, con cuestiones de género, y perspectiva de género, que esto no es mala palabra. Lo que hay que entender es que Argentina asignó compromisos internacionales para erradicar la violencia contra las mujeres por ser históricamente quienes estamos en situaciones de vulnerabilidad respecto a los hombres y eso también se extiende a distintas identidades sexuales que rompen esta idea binaria de hombre y mujer. Entonces, el retroceso que ha planteado el Ministro y el Presidente tiene que ver con minimizar esta cuestión que es histórica”.
La figura debe seguir existiendo
“Creemos que es importantísimo que la figura del femicidio siga estando femicidio, femicidio. En el año 2012 se incorporó por primera vez una agravante del homicidio. Históricamente el Código Penal tiene un homicidio simple cuya pena de prisión es de 8 a 25 años, y a partir del artículo 80 hay agravantes de ese homicidio que tiene una respuesta punitiva perpetua. O sea, quien recibe la condena y queda firme respecto de un homicidio calificado tiene una pena perpetua por alevosía, por ensañamiento. Y en el inciso 11 aparece esta idea de un hombre que mata a una mujer, un varón que mata a una mujer en un contexto de violencia de género. Es una forma de visibilizar esta grave situación que todos los días aparece. Tenemos feminicidios todos los días. Las mujeres mueren en manos de varones justamente en el contexto de violencia. También lo tenemos en la Ley 26485 desde el año 2009 la definición de violencia. Entonces, violencia económica, violencia sexual, violencia física, violencia psicológica, mediática. Cualquier situación en la cual la mujer se considera un objeto se la mate por considerarla una cosa, por celos, por los motivos que fuese entendido que no es un homicidio común. Y las estadísticas indican esto”, agregó la abogada penal.
Además destaco que “es importante mantener la figura, creemos que es muy importante la capacitación en género de todos y todas los operadores y las operadoras de la justicia”.
Sacar el femicidio es un retroceso
“Sacarlo es el retroceso. Lo que hay que es definir en cada caso concreto, inclusive exigir estándares de prueba y de evidencia, no de cualquier forma se prueba el femicidio. Es un contexto, hay que trabajar ese contexto porque, en general se producen en ámbitos bastante cerrados. Una declaración de la víctima o de los familiares de la víctima muy precisa, contundente y no que sea la última, la única herramienta. La visión de la víctima o de los familiares no puede ser la única evidencia o prueba para sostener el femicidio. Tiene que haber todo un trabajo del Ministerio Público Fiscal de la Acusación para investigar, para conseguir información y por eso hay protocolos. Hay que educar también y capacitar abogados y abogadas porque tenemos que tener perspectiva de género. No puede ser que los colegios de la abogacía miren para otro lado también sobre esto”, finalizó.